Rabia, furia y frustración

Tras golpear hace una hora una pared con el puño y destrozarme la mano descargando la rabia que sentía en ese momento, me dispongo a contar que, según mi parecer, nadie puede intentar sacarte cómo te sientes en un momento en el que ni tú mismo sabes que sientes, ni que te pasa, ni porqué actúas de la manera que actúas. Yo soy una persona un tanto impulsiva, que se deja llevar muchas veces por lo primero que le viene a la mente. Vivo casi sin pensar, intento no hacerlo para no estar mal, porque muchas veces cuando pienso divago y acabo mirando mi propio ombligo lo cual me hace entristecerme por las situaciones pasadas y las malas épocas que me inundan.

La rabia y la furia que he sentido en el momento de marcharme de "mi casa" es sólo comparable al hecho de una traición. Aunque en realidad no ha sido una traición como todos conocemos el concepto de traición, sino más bien como una traición al orgullo, el honor, las ganas de superación, al fin y al cabo, una puñaladita que te asestan la cual te hace ver que la persona que tienes enfrente no se fía de ti lo más mínimo. Y no se fía porque tus palabras repetidas una y mil veces no son creibles y tiende a desconfiar de hechos, como en éste caso "el mundo de las drogas" del cual hace ya tiempo (1 año) logré salir. Y eso duele, "jode" mucho. Es molesto que piensen de tí cosas que no son y más cuando es algo que te ha costado tanto y de lo que te sientes muy orgulloso. Si fuera la primera vez, aún te aguantas pero siendo tanta y tantas veces esa desconfianza, se te abre una "heridita" ya que la persona que te lo comenta te quiere, y quiere ayudarte, pero esa falta de confianza te hace plantearte nuevos problemas y adversidades.

Mientras escribo estas escuetas líneas aparece otra importante persona de mi vida, a la cual le oculto la existencia de este blog, ya que deseo que nadie de mis alrededores se entere de "mi diario personal en el cual escribo y reflejo mis pensamientos, deseos, frustraciones y aciertos".
Esta persona que también dice quererte, ha deseado hace pocos días tu muerte gritándolo de vivo a voz, ¿cómo me puedo sentir? En el momento en el que escuchas "te clavaría un cuchillo en el corazón", sólo se me pudo pasar por la cabeza ir a la cocina, abrir el cajón de los cubiertos, seleccionar el cuchillo más grande y llevarselo para pedir que me lo clavase, que lo hiciese, directamente ahi, donde decía, señalando con mis dedos mi corazón. Quizás en ese momento me hubiese sentido mejor. No suelo pensar en el suicidio, no es una cosa que considere que sea buena para nadie y menos para mi, mi vida la valoro mucho como para quitármela por sentirme mal.
Hoy he echo una pequeña reflexión, la cual me lleva a creer como llevo pensando hace varios años que mi entorno familiar es una de las causas por las cuales yo me siento muchas veces mal. Sea por "x" o por "y", dos factores principales dentro de mi vida, yo suelo tener jaleo, follón o complicaciones, da igual como lo llames, pero son problemas que me afectan a mi, a mi relación con esos factores y con la gente en general. Durante años me han producido mucho desgaste, y bien se que sería injusto culparles de mis problemas, porque mis problemas me los gano solito, pero creo que son un factor importante a tener en cuenta dentro de ellos.

Estoy en otra fase de mi vida de esas "no buenas" llamemosle, pero ahora que se inicia una semana algo "distinta" por diversos festejos del fin de semana siguiente, considero buen momento para empezar a realizar cambios. (Qué pena que ésto lo haya dicho tantas veces y no haya sido constante, sino sería la repera). Necesito buscar un trabajo, ya que necesito dinero para, por que no decirlo si es verdad, volver a cumplir mi sueño y pelear por otros muchos que vendrían a continuación. Con lo que y gracias a mi noctambulidad e "¿insomnio nocturno?" creo que al haber dormido pocas horas esta semana, la noche de hoy tocará descansar para tener fuerzas en ésta semana.

Deseo cambiar ciertas cosas de mi vida...¿empezamos?